Reseña: Felipe

¡Hola cazadores!

Acabo de llegar de la playita y, milagrosamente, no vengo más roja que el cangrejo Sebastián (todo un logro siendo yo), así que me he dicho que para celebrarlo esta noche ceno pizza. Pero bueno, este blog no va sobre mi gocheo (aunque bien podría, porque eso da para páginas y páginas). La cosa es que en el tren de vuelta a casa he terminado el libro que me había llevado y tengo muchísimas ganas de hablaros de él.

FELIPE DE JAVIER OLIVARES
PÁGINAS: 776.
SAGA: No.
PRECIO: 20€·
Su padre le enseñó a ser Emperador. Las mujeres le enseñaron lo que era la vida.

Esta es la historia de un niño que no eligió ser hijo de quien era. Que perdió a su madre con doce años y que veía tan poco a su padre que apenas recordaba su cara.

Es la historia de un joven que a los dieciséis años gobernaba España por orden del Emperador. De un hombre creyente y supersticioso, marcado por las mujeres que le rodearon, seductor y desconfiado, dueño de una gran sensibilidad y capaz, al mismo tiempo, de las mayores crueldades con sus enemigos.

Felipe no eligió ser hijo de Carlos I de España y V de Alemania. Pero lo fue.

Esta es la historia de un hombre que heredó el mundo.

Opinión personal

Antes de nada quiero comentaros que yo siempre me había referido a este libro como Felipe. Heredarás el mundo. Así, todo junto. Pero Goodreads dice que se titula solo Felipe así que bueno, así lo he dejado. Dicho esto, podemos ir al asunto, que diría una profesora mía.

Poco puedo deciros sobre el argumento que no diga ya el título, porque esta novela es eso: la vida de Felipe II de España desde su nacimiento, su educación, los años de la regencia, cuando finalmente se convirtió en rey, las dificultades posteriores... Vamos, que toda su vida desde que nació en Valladolid en 1927 hasta su muerte en El Escorial en 1598. Por supuesto, como buena friki sin remedio de la historia que soy (de las que siempre tiene el quesito amarillo en el Trivial) tenía que leer este libro que me pareció de lo más prometedor. Otro punto a favor es su autor, Javier Olivares, licenciado en historia y que además está detrás de series tan buenas como Isabel o El Ministerio del Tiempo, que, más allá de que te gusten o no (pero reconozco que están entre mis preferidas), hay que admitir que están muy bien documentadas y desde el punto histórico son una gozada.

Respecto a esto último, este libro no es la excepción. Tiene un gran rigor histórico y está muy bien documentado. Evidentemente es una novela, no una biografía, así que alguna laguna te puedes encontrar y hay cosas que pueden estar 'adaptadas' y demás, pero yo hablo en líneas generales.

Sin embargo, no es solo una novela histórica. Es una novela sobre los sueños y cómo se rompen, sobre los ideales a los que la realidad apuñala, sobre el poder y cómo él y la responsabilidad cambian a la gente. Y no siempre para bien.

"Quien conozca qué es el poder sabe que es una enfermedad que cambia a quien lo ejerce. Que convierte verdad en falsedad según la conveniencia del momento. Y que obliga a decir frases grandilocuentes que no tienen la obligación de ser ciertas."

De hecho, diría que esto es lo más importante para el autor, que se enfoca mucho en el cambio que se opera en Felipe a lo largo de los años. Como pasa de ser un niño que sueña con ser Amadís de Gaula a convertirse en discípulo de Maquiavelo. Y me ha gustado lo paulatina y sutilmente que esto sucede, porque es así como realmente cambia la gente: nadie se acuesta una noche y es otra persona diferente cuando se levanta por la mañana, sino que poco a poco las circunstancias te hacen cambiar. En el caso de Felipe se juntan las dificultades que trae gobernar el mundo con el tipo de educación que recibió.

El mayor problema que me he encontrado es que hay ciertos sucesos que son importantes pero se quedan muy en segundo plano, especialmente algunos en torno a los últimos años de reinado. Están mencionados muy por encima, en un párrafo y da gracias. Comprendo que es muy difícil meter tantos años en una novela sin convertirla en la enciclopedia Espasa (además tiene que resultar interesante al lector, no lo olvidemos) y que, como ya he dicho, Javier Olivares prefería centrarse en otras cosas, pero igualmente me ha decepcionado, las cosas como son. Eso sí, me ha gustado la mención, aunque solo sea por encima, a algunos personajes históricos que no son muy conocidos pese a su importancia, como por ejemplo María Pita.

Os diría que lo mejor de la trama es que no está centrada en la Leyenda Negra, ni tampoco en la Blanca. No presenta a Felipe como a un monstruo ni mucho menos como a un héroe. Simplemente intenta reflejar al hombre detrás de la corona, un ser humano al fin y al cabo que se equivocaba y muchas veces se veía superado por las situaciones, y además con graves problemas para confiar y delegar en otras personas debido, en gran parte, a la educación que le impuso su padre.

"Un caballero podía tener emociones. Un emperador podía tenerlas, pero no mostrarlas."

Creo que esto está muy conseguido en la primera parte de la novela, pero empieza a fallar después de la vuelta a Inglaterra. Felipe se convierte en una figura completamente hermética, y no de cara al mundo sino también para el lector. A mí me resultó imposible volver a empatizar con él y, sinceramente creo que la trama también decae mucho, centrándose demasiado en los 'salseos' con sus secretarios y la Princesa de Éboli, figura a la que, por cierto, no creo que la novela haya hecho demasiada justicia. Estas intrigas se tragan a todo lo demás y de verdad que llegados a cierto punto hasta me planteé dejar la novela.

Volviendo a las cosas que me han gustado, lo que salva al libro (aparte del rigor histórico, que eso para mí es importante) son los personajes, que algunas veces llegan a cobrar vida. Las hermanas de Felipe me han gustado mucho, sobre todo Juana de Austria, que me parece muy bien llevada. También María Manuela de Portugal y María Tudor me han parecido muy realistas y la descripción de sus respectivos matrimonios con Felipe que fueron, sobre todo el segundo, un despropósito. Juana "La Loca" solamente aparece en un par de escenas, pero tengo que decir que también me gusta el modo de presentarla.

Aún así, el premio gordo es para Carlos I, el príncipe don Carlos y don Juan de Austria. Y es que no puedo decidir porque me parecieron muy realistas los sentimientos de Felipe hacia su padre, el amo del mundo, al que nunca veía pero que de algún modo siempre estaba ahí y al que necesitaba demostrar que estaba a la altura. También se refleja muy bien la complicada relación con su primogénito pero evitando hábilmente caer en la leyenda negra. Al final lo acabas sintiendo por las dos partes. Y por último está don Juan de Austria, el hermano que vivió para servirle pero al que él siempre 'despreció' porque en el fondo le envidiaba por ser 'mejor' hijo de su padre que él, aún siendo bastardo. Esos sentimientos están reflejados de un modo discreto pero a la vez muy presente..

"Carlos no solo era su padre, sino también su maestro, su obsesión, su guía."

Y no puedo no mencionar al duque de Alba, que en esta novela no ´se bien por qué pero se ha ganado mi corazoncito. Supongo que por lo bien construido que está, con esa lealtad inquebrantable que convive con el orgullo de uno de los mejores guerreros de su época. Y más que nada porque habla un poco por esa Castilla vieja que se va perdiendo a lo largo de la novela, llena de orgullo por todo lo suyo.. Felipe no pierde el norte, él pierde Castilla, sus ideales de orgullo y honor.

"La vieja Castilla había renacido en las palabras del duque. La Castilla orgullosa de sus glorias militares. La que ama a sus héroes y no los abandona."

La relación con sus dos últimas esposas me ha parecido demasiado superficial (irónicamente, porque fueron sus matrimonios felices, pero bueno) y sobre todo he echado de menos a Isabel Clara Eugenia, de la que se dice que es la hija preferida del rey pero ahí queda la cosa, lo sabes porque te lo han dicho no porque el libro ahonde en ello.

Voy a ir terminando diciendo que Felipe es una novela histórica muy bien documentada y que refleja muy bien el cambio de Felipe II de príncipe que soñaba ser un caballero andante a rey sobrepasado por las intrigas de poder, las guerras constantes y los problemas que lo persiguen en todo momento. Quizá se centre un poco demasiado en lo negativo y en torno al final es demasiado vaga con todo lo que no sean las intrigas con Antonio Pérez y el delicado equilibrio del poder, eso sí. En este punto he echado de menos al Felipe hombre, cansada de tanto rey. Aún así, se salva por unos personajes muy buenos, que cobran vida, y lo bien que refleja las relaciones entre ellos. Os la recomiendo solo si os gusta la historia y tenéis interés en los Austrias, porque sino creo que llega un punto en el  que se puede hacer pesada y vas a acabar diciendo 'venga hasta aquí'.

PUNTUACIÓN: 3'5/5

Espero que os haya gustado la reseña y que me digáis qué os parece ^^
Un beso,

Ángela